lunes, 1 de octubre de 2012

Contra los suspensos: un buen desayuno y dormir bien.

Los alumnos que no hacen la primera ingesta del día presentan un peor rendimiento físico y mental.


Niños dormidos encima de los pupitres, o que necesitan urgentemente un tentempié para poder proseguir con las clases, ... La realidad es que los alumnos que no desayunan de una manera completa y equilibrada presentan un peor rendimiento físico e intelectual y una menor capacidad de atención y concentración, según los profesores de Educación Primaria encuestados en el estudio «El desayuno y el rendimiento escolar» elaborado por Kellogg's. Los resultados de este informe son desalentadores. A pesar de las terribles consencuencias que no desayunar tiene en las notas, en nuestro país existe todavía un 10% de los niños de entre 6 y 12 años que por las mañanas no toma nada a diario. Y entre los que sí desayunan, un 8% no lo hace en casa, (sino bollería industrial en el coche, o por el camino), y un 15% desayuna solo, sin la supervisión de un adulto. «Afortunadamente, más de la mitad de los niños desayunan a diario en casa, o con sus padres o con toda la familia, que es el escenario más idóneo para desayunar», en opinión de los profesores.

Falta de hambre.

 

Pero, ¿cuáles son los motivos que pueden llevar a un niño a no hacer esta primera comida del día? La encuesta señala que un significativo 70% de los niños que no desayunan no lo hace por falta de apetito. «Pero es normal que no tengan apetito, porque al levantarles con prisas y salir corriendo de casa al cuerpo no le ha dado tiempo a sentir la sensación de hambre», explica la doctora Margarita Alonso, doctora en Medicina con especialidad en Pediatría y especialista en aparato digestivo y nutrición. Lo que Alonso propone es, sencillamente, «despertar al niño antes para enseñarle a que tiene que aprender a desayunar con calma». De esta forma, añade, el pequeño tendrá al menos 10 o 15 minutos para hacer un desayuno equilibrado, que es aquel que contiene un producto lácteo, una pieza de fruta o zumo, e hidratos de carbono, a poder ser de lenta absorción.

La importancia del sueño.

 

Claro que para eso, también hay que acostarles antes. La realidad es que más de la mitad de los niños entre 6 y 12 años confiesa levantarse con sueño. En este sentido el doctor Estivill, pediatra especialista en sueño y autor de libros como «¡Duérmete niño» y «¡A comer!», advierte que los niños españoles se acuestan un promedio de una o dos horas más tarde de lo que deberían hacerlo, lo que repercute en un sueño más corto y de peor calidad. «Y esto a causa de los horarios que seguimos en España, donde los horarios laborales terminan muy tarde y obligan a toda la familia a rutinas totalmente inadecuadas con respecto al sueño», señala.

Dormir es imprescindible para tener un día con un buen estado de alerta.

 

Estivill además asegura que el sueño es «como un taller en el que se da una reparación física y psíquica, imprescindible para tener un día con un buen estado de alerta, capacidad mental para aprender conocimientos y energía para realizar todos los actos que la requieren. Entendiendo esta función de taller que realizamos durante el sueño, en esta franja de edad que va desde los 6 hasta los 12, los científicos nos indican que el número de horas ha de ser entre 10 y 11».

Los niños españoles no duermen lo suficiente.

 

El estudio de Kellogg's constata que en torno al 40% de los niños de 6 a 12 años cena entre las 21:00 y las 22:00 horas durante el curso escolar, se acuesta entre las 22:00 y las 23:00 y se levanta entre las 7:00 y las 8:00 horas.


 Fuente: abc.es

2 comentarios:

  1. helena ganga vicente26 de febrero de 2019, 20:31

    Me ha sorprendido este articulo debido a que me he identificado totalmente con lo que explica. Suelo acostarme tarde y levantarme con sueño. Y, además, por las mañanas suelo tomar solo un producto lacteo (leche o yogur), debido a que no tengo hambre. Gracias a haberlo leído soy consciente de que todo esto, además de ser malo para la salud, también puede perjudicar en nuestro rendimiendo y hacer que bajemos las notas. A partir de ahora, voy a intentar acostarme un poco antes y despertarme más temprano para así, poder desayunar correctamente y obtener un buen rendimiento. ¡De esta manera también podré desayunar en compañía de mi hermana y mis padres, que suelen hacerlo más temprano!

    HELENA GANGA VICENTE

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  2. helena ganga vicente26 de febrero de 2019, 20:32

    Me ha sorprendido este articulo debido a que me he identificado totalmente con lo que explica. Suelo acostarme tarde y levantarme con sueño. Y, además, por las mañanas suelo tomar solo un producto lacteo (leche o yogur), debido a que no tengo hambre. Gracias a haberlo leído soy consciente de que todo esto, además de ser malo para la salud, también puede perjudicar en nuestro rendimiendo y hacer que bajemos las notas. A partir de ahora, voy a intentar acostarme un poco antes y despertarme más temprano para así, poder desayunar correctamente y obtener un buen rendimiento. ¡De esta manera también podré desayunar en compañía de mi hermana y mis padres, que suelen hacerlo más temprano!

    HELENA GANGA VICENTE

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