Haz el bien y no mires a quién.

Como reza el dicho popular del título de esta entrada, deberíamos hacer el bien a todo el mundo sin importar el tipo de persona que sea. Además, debería realizarse de forma desinteresada, es decir, sin esperar nada a cambio. Este tipo de pensamiento no es nuevo y algunos sabios de la antigüedad como Séneca ya lo aconsejaban.

Llegar a este "ideal" sería lo recomendable, aunque todos sabemos que no es fácil comportarse correctamente con todas las personas. De hecho, no nos solemos comportar igual con nuestros hermanos que con nuestros padres, amigos o profesores. Muchas veces somos como un espejo que refleja cómo nos tratan los demás. Por ello, normalmente nos portamos mejor con nuestros amigos que con otra persona que, a nuestro juicio, nos trate de forma injusta.

Sin embargo, ya que somos animales sociales y dependemos los unos de los otros, la opción correcta siempre debe ser comportarse bien con todo el mundo, aunque nos cueste, puesto que como dijo el escritor León Tolstói "Solo hay una manera de poner término al mal, y es el devolver bien por mal".

Y aquí es donde aparece un concepto que nos puede ser muy útil en la vida, el llamado "círculo virtuoso". De igual manera que si estudias y aprendes mucho podrás enlazar más ideas que te permitirán aprender cada vez más, si tratas bien a mucha gente es más probable que te traten bien a ti y eso facilitará que sientas una inclinación por seguir haciendo el bien. Obviamente, no todas las personas te tratarán mejor si tu te comportas bien con ellas pero, por probabilidad, la mayoría sí que lo harán. Esto también hará que tengas más amigos, más probabilidad de conocer gente y más oportunidades de que te pasen cosas buenas en la vida (viajes, festivales, encontrar pareja, encontrar un trabajo, etc.).

Hacer lo contrario, es decir, no estudiar, no hacer ejercicio, no tener una alimentación saludable, no descansar lo suficiente, perder el tiempo con las redes sociales y no tratar bien a los demás, son ejemplos de "círculos viciosos" que deteriorarán tus capacidades, tu salud y tus relaciones sociales.

En el siguiente vídeo tienes, a modo de ejemplo un poco edulcorado, el círculo virtuoso que originará hacer el bien a los demás, en este caso llamado "cadena de favores". Espero que lo disfrutes y reflexiones sobre él.